¿Es el anarquismo un taparrabos que sirve para dar nombre a cualquier posición más o menos rebelde?
A pesar de caer en la incorrección política me atrevo a afirmar que sí. De allí la necesidad de clarificar sus posibilidades teóricas para guiar una acción con significado político. Como alguién dijo: "no hay nada más práctico que una buena teoría".
Pero la teoría no debe surgir de la cabeza de un iluminado, sino del análisis crítico del presente y del repaso crítico también de las experiencias pasadas... cosa que a juzgar por lo que se ve en la Red no suele ser tarea prometedora (más allá de las historias sesgadas dirigidas a los que están dispuestos a creer lo que venga).
El problema central de la teoría anarquista está en conjugar su rechazo a la autoridad impuesta coercitivamente con la necesidad de organizarse adecuadamente para influír en la sociedad. Digamos que es una tarea aparentemente contradictoria. Y para ello el pasado ofrece algunas claves.
Antes de seguir en nuestra línea minimalista, me gustaría que el lector diera una ojeada a este texto. Luego podemos hablar.
Ce que parler veut dire Pierre Bourdieu
Hace 1 día
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